Mito o verdad: "Trabajar de manera independiente"

 

Actualmente tenemos la creencia de que no hay trabajo, es cierto que cada vez las empresas requieren menos personal, pero eso no es impedimento para quienes realmente buscan desarrollarse o tener un futuro mejor.

 

Hoy vamos a analizar las dos modalidades de trabajo más populares, analizaremos sus ventajas y desventajas y luego tú podrás tomar tu propia decisión (espero), sobre cuál de estas opciones de trabajo es tu favorita.

 

Para el post que vas a leer, decidí conocer la opinión de varios amigos que trabajan o han trabajado bajo alguna de estas modalidades y también de los seguidores de mi página de Facebook.

 

Trabajar para alguien:

Es la opción que la mayoría de personas prefiere, porque les asegura (hasta cierto punto), una entrada mensual, que servirá luego para cubrir gastos personales, los gastos del hogar, que incluyen los servicios básicos (agua, luz, teléfono, internet, televisión por cable, alquiler o municipalidad, alimentación, ropa, combustible o pasajes).

Bajo esta modalidad, el trabajador sólo debe preocuparse por cumplir con el horario establecido haciendo lo que se le pide y estipula en su contrato, el cual puede contener o no, el plazo por el cual será contratado.

Las cargas sociales como el seguro social y los impuestos de venta y renta corren por cuenta del propietario del negocio o la persona contratante una parte y otra parte, aunque pequeña, al empleado; para el seguro social.

Aunque el ingreso mensual o quincenal es "fijo", esto al final resulta no ser tan cierto. El crecimiento de una empresa nace de la demanda que pueda tener de sus productos o servicios, por tanto, si esta empresa de pronto empieza a ver reducida sus utilidades (ganancias), empezará a recortar gastos y buscará aumentar la productividad de la misma, es aquí donde se empiezan a tomar decisiones importantes entre las que se incluyen:

  • Robotización de los procesos repetitivos.
  • Recorte en gastos innecesarios (impresión de facturas, por ejemplo).
  • Incorporación de nuevos sistemas informáticos que agilicen los procesos de contabilidad.

Como vemos, todas las opciones anteriores hacen que se requiera menos personal, por lo tanto, propicia un despido masivo, por eso es que, si trabajamos para alguien, por más que parezca que tenemos trabajo fijo, no te lo creas, es mentira, estamos en un mundo que puede variar muchísimo en muy poco tiempo.

Por otro lado, trabajar para alguien implica responder a un horario definido, en la mayoría de los casos, cumpliendo un rol que puede o no estar definido en tu contrato. Las vacaciones cuando trabajas para alguien son de quince días por año y sólo un día libre a la semana; si te ausentas más de un día, se te verá reflejado en tu salario.


Trabajar de manera independiente:

Trabajar de manera independiente, significa que “no trabajas para nadie” y lo pongo entre comillas porque en realidad, tus clientes se vuelven tus jefes, eso sí, no tienes restricción de horarios, ni restricción de vacaciones, puedes alinear tu tiempo de forma que puedas estudiar y trabajar en los horarios que te plazca “sin que afecte tu salario” (entre comillas, de nuevo, porque puede que sí afecte y más adelante explico cómo puede ser esto posible).

No tienes jefe: Ni falso ni verdadero.

Cuando digo que no trabajas para nadie, me refiero a un modelo tradicional de trabajo, es decir, no tienes un jefe inmediato, tú eres tu propio jefe, esto te permite planificar los horarios en los que quieres trabajar o en los que quieres ofrecer disponibilidad, aunque en la teoría decimos que no tienes jefe, en la práctica esto es falso, ya que tu cliente se vuelve tu jefe y si a tu cliente no le gusta el trabajo que hiciste, es muy posible que “te despida”, es decir, que no te vuelva a contratar o recomendar en otra ocasión.

Por eso cuando realices trabajos para alguien, ten siempre en cuenta esto, ya que, si quieres asegurar una buena relación entre tus clientes, debes ofrecer lo mejor en cada cosa que hagas, para que tus clientes no se decepcionen y tengas más probabilidades de que te llamen de nuevo o que te recomienden.

Los trabajadores independientes son vagos: Falso.

Aunque tus horarios son muy ajustables y el margen de ganancia puede, en ocasiones, ser superior que, trabajando de la forma tradicional, por horas (esto porque la forma en que se evalúa el costo del trabajo es diferente en comparación a como se hace tradicionalmente). Sí que es cierto que hay que trabajar muchísimo para conseguir una entrada “estable” (hasta donde cabe), para poder suplir todas tus necesidades.

Vacacionas cuando quieres: Verdadero.

Las vacaciones también las escoges en las temporadas que más te plazca, puedes organizarlas de la forma que quieras y por el tiempo que quieras, en tanto, obviamente, tengas todo debidamente planificado, desde el tiempo que pasarás sin trabajar, la cantidad de dinero que piensas invertir en tus vacaciones, la fecha de regreso y el que tus clientes sepan de tu descanso, para que no te llamen durante ese tiempo. Si haces muy bien tu trabajo, créeme, tus clientes esperarán a que vuelvas de tus vacaciones para llamarte y puede ser que tengas mucho trabajo acumulado. Por eso da siempre lo mejor de ti en cada uno de tus trabajos.

La vida es más fácil para alguien que trabaja cuando quiere: Falso

Esto es sumamente falso, cuando se trabaja de forma independiente, uno mismo debe costearse el valor del equipo que necesitas para trabajar, en el caso mío, las herramientas, los suplementos de limpieza, servicios de internet y telefonía, tanto móvil como fija, además de los viáticos y pasajes o combustible, en caso de que ofrezcas servicio express.

Siempre te sobra el dinero: Falso

Puede ser que, como trabajador independiente, tengas que trabajar mucho más que como empleado, para poder salir adelante, sin embargo, si eres una persona organizada, esto de trabajar mucho podría ser sólo al principio, mientras te acomodas económicamente y te permites contratar a alguien más que te ayude.

También hay que mencionar, que no siempre se obtienen los ingresos suficientes como para cubrir los gastos fijos mensuales, por eso, en los meses que te vaya bien, es bueno que te hagas de un ahorro de emergencias, para que no te desconecten los servicios básicos y puedas salir adelante con la tarea.

Es fácil planificar el tiempo que le dedican a cumplir las tareas: Falso

Esto es falso porque al ser tu propio jefe, eres también tu propio gestor de proyectos, entonces necesitas tener una idea clara de las metas que quieres alcanzar al final de la semana, ordenarlas por prioridades y, asimismo, asignar estas tareas a los días que más te convengan, además de tener presente cualquier imprevisto que se presente. En cambio, como empleado, es tu jefe quien te dice qué hacer, cuándo y en ocasiones, cómo.

No hay que preocuparse por pagar responsabilidades sociales: Falso

Súper falso, contrario a lo que mucha gente piensa, los trabajadores independientes también tienen responsabilidades sociales, también tributan y también pagan el seguro social. También deben facturar y también deben declarar ante el Ministerio de Hacienda cada movimiento relacionado con el trabajo que desarrolla y con la categoría en la que se inscribió. En caso de no declarar o de no pagar cuando se debe, hay una fuerte multa. 

Aclaración: Siempre se debe declarar cada venta y compra de tus servicios, aunque no tengas que pagar tributo, SIEMPRE debes declarar.


Después de lo que hemos descrito aquí. ¿Vas a seguir creyendo que no hay trabajo? Hay trabajos que requieren mayor inversión que otros, te recomiendo que empieces ofreciendo algún servicio que no requiera tener tanto dinero inicialmente, pero que te dé opciones de crecimiento.

Ahora, desde mi punto de vista, yo prefiero trabajar de forma independiente, aunque a veces tenga que trabajar diez veces más que siendo empleado, pero, honestamente, siendo trabajador independiente, he podido conocer personas, lugares y he podido seguir estudiando sin tener que preocuparme por cumplir un horario, puedo alternas las tareas de la Universidad con el trabajo y viceversa.

Pero como dije antes, tienes que ser muy organizado, tienes que ser muy disciplinado para saber qué haces hoy y qué vas a hacer mañana, yo creo en el emprendedurismo, pero para llegar a ese punto, debes ser consciente que en ocasiones vas a sudar sangre, pero de que vas a ser feliz, vas a ser feliz, porque sacarás adelante tu propio negocio, aquel que soñaste, aquel que la gente te dijo que no podrías realizar, aquel que hoy no sólo te da de comer, sino que también te hizo millonario.

Nunca pares de soñar, si lo tuyo es ser dueño de tu propia empresa, empieza por ser trabajador independiente, ofrecer el mejor servicio y estar en un proceso de constante mejora para que te mantengas siempre como primera opción de tus clientes.

Si crees que me faltó algo en este post, házmelo saber dejándome tu opinión en los comentarios.

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